LADISLAO PLASENCKI Y SU IMPORTANTE MUESTRA EN HOMENAJE A VALLEJO
EXPANSIÓN DE HORIZONTES PARA EXPLORAR DISTINTAS PERSPECTIVAS VISUALES
Por LUIS ALBITRES MENDO
“En esta
convergencia de formas de expresión, el arte se convierte en un vehículo para
el diálogo, la interpretación y la expansión de horizontes. La expansión no
solo invita a los espectadores a explorar distintas perspectivas visuales, sino
también a formar parte de este diálogo dinámico en el que lo individual se
encuentra con lo colectivo y las diversas realidades se entrelazan en una
sinergia de creatividad y reflexión”
RUBEN RAMOS
LADISLAO
PLASENCKI (Trujillo, 27 de junio de 1946), reconocido pintor, muralista, poeta,
novelista, ensayista y autor de numerosos libros. Su última pictórica, basada
en torno de la poética vallejiana, viene impactando al público trujillano, ya
que con 15 óleos y 20 dibujos a tinta y carboncillo, ha plasmado toda una
auténtica mitología que se inauguró el 15 de abril y estará abierta hasta el 30
de mayo de este año, en los amplios corredores
de los claustros del antiguo convento de los jesuitas, donde se fundó la
Universidad Nacional de Trujillo.
SE ENTRELAZAN EN UNA SINERGIA DE CREATIVIDAD Y REFLEXION
La muestra, valiosa en sí misma, dispone de magneficencias múltiples,
estéticas, poéticas y además constituye un émulo para las generaciones actuales
y venideras: Ladislao Plasencki rubricó su homenaje personal y colectivo a
Vallejo, con una donación de las obras exhibidas a la Universidad Nacional de
Trujillo, ya que él también recibió clases en ella, revelando con este gesto, generosidad
y gratitud en la escena trujillana y nacional.
Iniciativa artística y pragmática que definitivamente invitará a muchos a
seguir esta senda gloriosa del arte y la cultura, en una ciudad como TRUJILLO.
Ya se ha dicho que nada sustituye la impresión que causa un poema, una
música o una pintura. En los distintos rostros o las cabezas de Vallejo que ha
pintado o dibujado, Plasencki realza el impacto psicológico de los mismos:
Penetración en la mirada, proyección hacia horizontes futuros, retratos plenos
de mundo, planetarios, bulle en ellos riquísima esencia espiritual. La testa de
Vallejo irradia su emanación empática, iluminada y resplandeciente, con la
claridad y brillantez de colores solares, que dicen mucho, proclaman un estado
de alerta y el absoluto y elevado grado de conciencia al cual Vallejo había
arribado.
Dibujos y óleos diseñados con un estilo muy personal, inspirados
básicamente en la poética vallejiana, incluyendo el rostro y la cabeza del vate
universal, tomando títulos de sus poemas para plasmarlos en pinturas y dibujos,
que realmente tienden a un surrealismo muy original. Criaturas y personajes,
amén de retratos de Vallejo que disponen de un gran valor estético. El
simbolismo salta a la vista, enfocados y realizados en diversas técnicas, tanto
geométricas como futuristas, en planos diferentes y plurales conformaciones
simbólicas que realzan la propia estilización y el universo onírico del autor,
Ladislao Plasencki, aludiendo a las premisas prioritarias del cosmos poético
vallejiano, las cuales disponen de ejes primordiales: Entre otros, el amor
universal, la unidad cósmica del hombre y su indeclinable e impostergable
unidad.
AFIRMANDO LA RUTA CULTURAL DE LA CIUDAD
Esta exultante muestra y el gesto generoso de Plasencki con la consiguiente
donación de los mismos, constituyen un hecho artístico, en pleno bicentenario
de la creación de la UNT, que inaugura una sugerente nueva etapa para el
antiguo e histórico claustro del exconvento jesuita: Bien merece ser un
valiosísimo centro de arte, donde la antigua biblioteca universitaria
resplandecería como una estupenda galería de arte y todos los ambientes
aledaños, incluyendo todos los espacios que rodean a la plazuela central
podrían ser dedicados a las distintas artes que la universidad propicia para el
desarrollo artístico del alumnado: Danzas, folclor, música, ballet, teatro,
declamación, y por supuesto artes plásticas,etc. Desenvolviendo integralmente la creatividad de sus alumnos.
ADMIRAR Y AMPLIAR LA COMPRENSIÓN DEL UNIVERSO VALLEJIANO
La ciudad de Trujillo y sus ciudadanos merecen enorgullecerse de este
futuro espacio para el arte y la belleza que producen sus propios hijos, ya que
la ciudad, hace muchos años, brilla con luz propia, con bienales de arte y
festivales de renombre a causa del talento, ingenio y creatividad de sus
artistas, formados en la ilustre Escuela de Bellas Artes, la cual lleva el
nombre precisamente de un artista nacido en Trujillo, el célebre Macedonio de
la Torre.
La colectividad de la culta ciudad de Trujillo agradecerá con creces este
hecho, ya que influirá definitivamente, para que continúe el crecimiento
cultural y artístico de la región.
Si bien , desde el punto de vista de la proyección artística , con muy buen
criterio, la exposición que está siendo exhibida en los corredores del claustro
del 15 de abril al 30 de mayo, seguirá su benéfica influencia pues la
excelencia sobrevendrá cuando todas estas magníficas obras sean colgadas en las
paredes del Auditorio César Vallejo, su destino natural por lógica
concomitancia temática y estética, tal como las autoridades universitarias han
decidido, a fin de que puedan ser admiradas y ampliar la comprensión del universo
vallejiano, pues en ese predestinado local, estarán a la vista del público en
general, ya que ahí se realizan, constantemente, diversas actividades
culturales y académicas.
RIQUEZA INSPIRADORA DE SU ELÁN VITAL
El persistente leit motiv de los dibujos y óleos de Plasencki en la
muestra, es la poética vallejiana. Contemplamos incluso títulos de sus poemas
implantados en la inspiración pictórica que le caracteriza. Plasencki, en la
pictórica expuesta revela facciones inéditas de la exuberante humanidad
vallejiana. La pletórica entrega de César Vallejo , en su poiesis, apasionado y
sumamente humano.
Tal es la fuerza de su mensaje y el espíritu que en todo momento ha impreso
el pintor, al intentar, con una vitalidad impresionante, plasmar la compleja
mentalidad y rica personalidad del inmortal aeda.
Múltiples son los dibujos a tinta y carboncillo. Y necesaria la técnica en
blanco y negro, para explorar, con donaire y penetración psicológica la
abstrusa naturaleza del mensaje poético. Sin duda alguna, digna de resaltar es
la profusa e intensa dedicación que ha hecho el autor, en la pintura o el
dibujo, al retrato del rostro y la genial cabeza del vate, con epónima
orientación, ennoblecidos y resplandecientes para la posteridad.
Logra ingresar, incluso, de algún modo, en la psicología vallejiana, más
allá de lo literario y el pintor-aeda nos muestra la perspicacia de su
aproximación, tanto cromática como psicológica, en las facciones, , los
detalles de sus plurales rostros, enfatizando en todos estos cuadros, no
solamente la belleza de espíritu, también la fortaleza y energía de su potente
mirada, la cual con toda certeza, conmueve y transmite, la espontánea
arrogancia espiritual y la jerarquía de la sapiencia del vate universal, adquirida
ya, a su aún corta edad.
De su impresionante testa nacen llamaradas, luces de una premonición y
sabiduría proverbial, emergiendo resplandores de nuevas auroras de conocimiento
y belleza inusitadas.
En todos los cuadros, cromáticos o en blanco y negro, la genial cabeza del
vate inmortal, domina la composición, entronizando en la mayoría de ellos, la
vasta inspiración de sus poemas. Demostrando el pintor, con ellos, la riqueza
inspiradora de su elán vital: Su vida, biografía, estancias diversas, y mensaje
de sus versos. Todas las obras engloban y lucen la fantástica herencia
antropológica y cultural de un poeta peruano y por ello andinoamericano, del
cual nos enorgullecemos todos.
Plasencki ha sabido resaltar instancias psicológicas especiales,
imprimiendo en sus óleos y dibujos las sugerencias más disímiles y unánimes
pues Ladislao proyecta una pictórica suscitada por la admiración y pasión por
la poética vallejiana combinada con un magnético componente de su propia
cosecha. Sale a luz, emerge
explícitamente, el gran poeta que lleva consigo y su oceánica riqueza cultural.
Su vena artística es innegable.
En suma, Ladislao Plasencki, versátil artista plástico, realiza una
donación de 15 óleos y 20 dibujos a tinta y carboncillo a la Universidad
Nacional de Trujillo, su Alma Mater. Todas estas obras tienen su génesis en la
poiesis vallejiana, cuyo autor, también exalumno de la UNT, encandila al mundo
con la profundidad y belleza de su mensaje poético.
Con el empuje, la vibración y el arrollador ingenio que le concede su
calidad de poeta, Ladislao Plasencki, identificado con la pulsión vallejiana,
imparte iniciativas urgentes, dadas las circunstancias y los tiempos. Con
magnánimo deseo realiza esta muestra, infundiendo iniciativas y generando
perspectivas de gran alcance.
Con esta muestra nos ha demostrado , que todos podemos acceder a los poemarios de Vallejo, todos podríamos amalgamar ideas y creaciones, como en un prodigioso Aleph borgiano, múltiples universos que se entrecrucen en mentes plurales y variopintas. El reto está lanzado.