jueves, 21 de abril de 2022

CAJAMARCA-PERÚ-AMÉRICA ANDINA: QUIRINO VÁSQUEZ PITA: EDÉN OCULTO: IDILIO A LA NATURALEZA. Por Luis Albitres Mendo

 

QUIRINO VÁSQUEZ PITA



EDÉN OCULTO : IDILIO A LA NATURALEZA EN MEDIO DE LA URBE



Por LUIS ALBITRES MENDO

 

QUIRINO VÁSQUEZ PITA nació al calor del hogar conformado por sus padres, en la Hacienda de su propiedad, denominada PALTURO, muy cerca del maravilloso pueblo ecológico de JESÚS, a 20 kilómetros de la encantadora ciudad de CAJAMARCA, un 25 de diciembre de 1938, “entre pencas y eucaliptos”, como suele afirmar él mismo, cuando se refiere al día de su natalicio, durante una Navidad de aquel entonces.

Respirando ese aire de calidez y apertura, en su fundo, donde sus padres eran inmejorables anfitriones. Ese detalle, marcó para siempre su destino y rumbo. Quirino, profesor, pintor, narrador, pionero, valiente y amante de la alegría. Ha causado revuelo, entre conocidos y vecinos, el ansia de estar incluídos en la lista de sus amistades.

Una vez instalado en Trujillo, con su propia familia; NANCY, su esposa, quien fue la adorada e inolvidable compañera de su vida, a quien ama y recuerda por siempre y sus tres bellas hijas; primero en la urbanización Santo Dominguito, cerca a La Noria y luego en el centro de la ciudad de Trujillo.

Como Nancy era químico-farmacéutica, inauguraron primero una farmacia en Trujillo. Quirino, incansable e inquieto, se abrió espacio inaugurando otra farmacia en Tarapoto, donde gracias a su carismática personalidad, obtuvo mucho éxito.

EXCEPCIONAL SENTIDO DE LA AMISTAD. DESTELLOS DE ALEGRÍA

Sus invitaciones y reuniones se hicieron clásicas. En la urbe de Trujillo, pocos serán los intelectuales y artistas que no hayan pasado, siquiera una vez, por los acogedores y auspiciosos salones de la casa de Quirino Vásquez Pita.

Quirino ha cobrado notoriedad en la ciudad de Trujillo por su excepcional sentido de la amistad y la exquisitez de sus invitaciones. De raza le viene. El hecho de ser cajamarquino. En nuestra tierra, nuestra gente es muy acogedora y hospitalaria.

 

SU EDÉN OCULTO: UN IDILIO A LA NATURALEZA

 



Quirino tiene un solar en pleno centro de Trujillo, que contiene al fondo de la casa, en lo que habría sido el huerto, hoy convertido en un placentero edén, un jardín interior, donde invita a todos, familiares, amigos y visitantes, generalmente poetas, escritores y artistas de la música y de las artes plásticas, ya que él es un apasionado artista, tal como podremos apreciar en su casa, totalmente decorada con cuadros y pinturas de su propia cosecha. El buen gusto se aprecia por doquier.

JARDÍN QUE REFLEJA UN GENEROSO CORAZÓN

 Amante de la naturaleza desde su nacimiento, Quirino ha diseñado la existencia de ese bello jardín, donde están plantados algunos árboles frutales y hay flores que obsequian fragancias y colores.

Al frente de este verdor, casi paralelamente, nos dan la bienvenida acogedoramente el espacio abierto de sala y comedor, teniendo al fondo también un horno, además de un infaltable bar. Todo, artística y estéticamente, dispuesto.

De la pared principal de esta estancia cuelgan óleos o acuarelas de temáticas costumbristas como peleas de gallos, danzas y paisajes de la selva, la sierra o la costa. Son obras pictóricas pintadas en diferentes épocas, pues pertenecen a diversas residencias del pintor, ya sea en la selva de San Martín (Tarapoto), la ciudad de Trujillo o Cajamarca. Han sido colgadas justo en lo que se ha consolidado como una simpática y larga galería de arte.

Este bello jardín semeja todo lo bueno que Quirino posee guardado, para los demás, en el jardín interior de su alma, reflejando un espíritu generoso y noble.

 

QUIRINO con el periodista y escritor ecuatoriano ADOLFO PARRA MORENO, quien asistió al CAPULÍ 2018


La poeta y escritora argentina MARÍA AMELIA DINOVA, junto a QUIRINO. Ella también estuvo en el CAPULÍ 2018.

CON INCONFUNDIBLE SABOR CRIOLLO

 

Tan buen anfitrión, Quirino debe haber estelarizado más de un centenar de reuniones familiares y amicales, a través de los años de su existencia. Aderezando siempre con inconfundible sabor criollo, la música, protagonizada generalmente en vivo, con diferentes creadores, intérpretes y compositores.

En la bulliciosa asistencia brillaban invitados especiales de notable calidad: Poetas, narradores, escritores, pintores, escultores, profesores universitarios, actores, bailarines. Y la jarana arrancaba hasta altas horas de la noche.

Los artistas en Trujillo ya saben que pueden contar con su aporte amical. Su vida está marcada por esas estupendas cualidades: generosidad, amistad y amor al arte.

Formidables reuniones que unían lo cultural a la gastronomía, la música y los tragos motivadores, razones para apresurar las madrugadas entre baile, comida y charla.

La parla incluía, al calor de las copas, carcajadas y jocosidad, hilaridad creciente y el goce de la danza, las damas también sacaban a relucir sus dotes artísticas. Todo esto era coronado por aplausos a los merecimientos de músicos y artistas.

El dilema era quedarse hasta el final. Se estaba tan bien, pero el reloj nos avisaba que el amanecer se aprestaba ya a iniciar su aparición.

Con esta experiencia, Quirino debe tener en su colección de anécdotas, una gran cantidad de historias y episodios memorables que serán narrados en sendos libros, de acuerdo a sus últimos anuncios.

TÍPICO AGLUTINADOR DE AMISTADES

 Quirino Vásquez Pita es el típico aglutinador de amistades en torno a la música, la poesía, la guitarra y otros instrumentos, los libros y sus autores. Siempre, desde la época en que coincidimos en la ciudad de Trujillo, siguiendo la tradición de sus padres, lo hemos apreciado como un magnífico anfitrión.

A Quirino se le veía atento, servicial, rodeado de un sinnúmero de artistas, compositores y autores, sean músicos o literatos, en tertulias interminables, que realmente deseábamos no tuviesen fin.

JUBILOSA FORMA EN QUE SE PLASMA LA CATARSIS

 

Estas sesiones interculturales eran peculiares y muy concurridas, pues Quirino departía con todos y la conversación alrededor de temas diversos, hegemonizando las culturales, se combinaban con chascarros, experiencias varias, bromas y sobre todo, música agradable, romántica, sentimental, telúrica y criolla.

A veces la cita era de guitarristas, otras, cultores del canto, criollo o contemporáneo. O también del saxo, el acordeón y del cajón peruano.

De una manera divertida, estos rituales amicales servían a la vez de catarsis y desfogue. Una jubilosa forma de sacar a flote, problemas y sinsabores, y enviarlos al tacho del olvido.

LENGUAJES HUMANOS ELEMENTALES: LA MÚSICA Y LA LITERATURA

Quirino Vásquez Pita es un personaje cajamarquino que se caracteriza por una apasionada entrega a la cultura y al arte en general.

Desde que lo reencontré en Trujillo, en torno a él agrupa a literatos, músicos y artistas en general, quienes gozosos disfrutan de las tenidas culturales que él organiza.

En esas noches de bohemia se bebía moderadamente, a gusto de cada cual y el auténtico regocijo llegaba sobre todo por las melodías musicales y la calidez de la amistad.

A esas alturas de la noche afable por el festejo y la celebración, retozan los chascarros y las bromas. El tiempo se hace tan corto, transcurre tan rápido, que llega la aurora trayendo nuevas inquietudes y esperanzas.

Refulge la luz mañanera en medio del espacio abierto de la casa, en ese jardín interno, lleno de árboles frutales y flores que transmiten frescura y conceden color y armonía a todo el ambiente.

Y justo, debido a estas placenteras experiencias, lenguajes humanos tan elementales como la música y la literatura, impresos ya en la existencia humana, llegan al alma con facilidad.

 

CELEBRAR LA VIDA CON EUFORIA Y ENTEREZA

 

Entretejiendo anécdotas de su azarosa existencia o narrando algunos tramos de su interesante vida, uno se entera de los entretelones de su intenso y trajinante existir.

Con una constancia envidiable, Quirino ha aprovechado muy bien el tiempo del confinamiento, ya sea leyendo buenos libros, escribiendo cuentos, oyendo música selecta o plasmando obras pictóricas.

Y claro, debido al inquebrantable entusiasmo de Quirino, ahora que todo está volviendo a la normalidad, pronto volveremos a celebrar la vida, como en los mejores tiempos, con la euforia y entereza con que se empeñaba siempre en atender y agasajar a los amigos.

Y así, retornarán los jubilosos instantes en que disfrutaremos de regocijantes tertulias, matizadas con creaciones poéticas, narraciones realistas, fantásticas o de ficción, y con la fineza de atención de ese gran amigo llamado Quirino Vásquez Pita, anfitrión por antonomasia.                    Gracias a su gentileza y generosidad nos acogerá nuevamente en su amplia casona, donde ha diseñado especialmente en el interior, la existencia de ese vistoso, impactante y bello jardín, innegable reflejo de su magnánimo corazón.

SYLVIA, la segunda de las tres bellas hijas de QUIRINO