15 DE JUNIO
NACE NALO ALVARADO BALAREZO
PROCLAMA A LOS CUATRO VIENTOS
Por Danilo Sánchez Lihón
Para las almas generosas
todas las tareas son nobles
Eurípides
1. El agua
y el aire
Tengo la plena y absoluta convicción que, Armando Alvarado Balarezo, nuestro querido Nalo, es un imprescindible de la historia. De talante fresco, lozano, jubiloso, esperanzado en construir un mundo mejor, cuando en cualquier reunión pasea su imagen de un hombre que acabara de emerger de un manantial, o de una fuente de agua clara y airosa.
Diáfano en todo, y en quien el significado de diáfano le cae bien en todas sus acepciones. Así: “cuerpo que deja pasar la luz a través de sí y casi en su totalidad”. Y aún más, esta otra acepción del vocablo, cual es: Que tiene una gran cantidad de luz o de claridad. Pero diáfano también significa lo que a manos llenas él hace en todo momento y cuál es: alumbrar, hacer visible lo ignoto, y encender.
Diáfano también es revelar, manifestar, y evidenciar. También es aparición, visión, sueño; es imagen en el espíritu. Y todo eso y mucho más es Nalo. Se vincula al agua pura y al aire sin bruma. Así como se asigna a personas que pueden discernir con claridad. A lo cual él agrega algo superlativo y mayor, cuál es: el hecho de ser además un hombre generoso, siempre dando ánimo, cariño, y poniendo el toque final de lo que es justo, preciso y cabal.
2. Utopías
posibles
Porque: ¿Quién de nosotros vive como él las 24 horas del día consagrado en la adhesión a los demás, difundiendo lo que escriben, lo que hacen, como también lo que sueñan? Todo también por cariño a su pueblo, a su país y a su cultura, como por entrega hacia el arte y a la vida trascendente. Revisando primero y haciendo enmiendas a los textos de los demás, luego dándoles brillo y esplendor a fin de que salgan mejorados debido a que de ellos se valen los niños y jóvenes para hacer sus tareas.
A continuación, acicalándolos y dándoles apoyo gráfico, para después, ya a los textos con imágenes puestas por él, textos que no son los suyos sino de los otros, darles cobertura y expansión. Y así, difundiendo a todo el mundo, cada grumo de ternura, de valor y de belleza, de ilusiones generadas desde nuestras más recónditas provincias y desde tierras frecuentemente proscritas y olvidadas. Hacer eso, acaso, ¿no es supremo?
Con Nalo ahora alcanzamos a proyectarnos al mundo, con textos e imágenes que contienen percepciones, sentimientos, ideas, propuestas, padeceres y acciones sublevantes, convertidas en utopías posibles e imposibles, convirtiendo lo que podría ser polvo y ceniza en memoria imperecedera.
3. Convicciones
y certezas
Y esto lo logra Nalo, además de ser por su buen corazón, gracias a que es un consumado experto en el manejo de lenguajes y técnicas de diseño y composición en soportes y formatos electrónicos, logrando en sus despachos de internet asociar a la palabra escrita íconos, música, movimiento y varios otros efectos colaterales.
Siendo así y gracias a él queda para siempre circulando en las ondas del ciberespacio nuestras temblorosas emociones, nuestras estupefactas añoranzas y, de nuestros labios, las quejas y las inconmensurables alegrías y esperanzas
Porque es él quien todo lo acoge, lo acepta y lo alienta, pero mejorándolo. Él construye y nos hace llegar a cada rincón, y hasta a nuestras mesas de trabajo, el pan caritativo de todas nuestras expectativas. Y que todas juntas hacen una lograda utopía por la cual vale arriesgar la vida; traspasadas por el néctar de nuestras vibraciones más sentidas, como por la fortaleza de nuestras convicciones y certezas ineludibles.
4. A manos
llenas
En cuanto a su propia obra, Nalo produce unos textos breves y luminosos, cortos y vibrantes, con la ternura acumulada en su médula, y aleteando hacia los bordes el sentido más genuino de lo humano y del amor hacia nuestros seres queridos y pueblos de origen.
Que son como las pepitas de miel que cargan esos moscardones de la primavera de los pueblos andinos, y que anidan en los magueyes de los aleros de nuestras casas nativas. A esos textos él por humildad y porque el término es íntimo, sufrido y entrañable, los llama “Hilachas del alma”.
Al fin, hilachas de oro de muchos quilates, de honda ternura decantada, filamentos tejidos con polvo de estrellas de los cielos de nuestras serranías. Copitas de vino no únicamente llenas de contenidos estéticos sino colmadas de sabiduría de vida, de experiencia y reflexión acrisolada.
Escritos en los que siempre hay ilusión, aquella flor ahora exótica, tan rara y exquisita que cada vez escasea más en nuestras letras y más aún en nuestras vidas descalabradas, y que él a manos llenas nos prodiga. Y es porque Nalo ama lo fidedigno e inconfundible, lo humilde y cotidiano, lo que contiene y transporta afección y cariño.
5. Dulzura
del lino
Tiene Nalo en el alma la blancura inmarcesible de esas antorchas de pureza y luminosidad que son los nevados, que alumbran como faros y guardianes desvelados de la vida auténtica que se teje y desteje al pie de los quietos tejados, mientras aquellos custodian desde el telón de fondo de su Chiquián querido.
Tiene Nalo la limpidez de los picachos de nieves eternas de la cordillera del Huayhuash y del impoluto Yerupajá que se mira desde su terruño adorado, que él lleva consigo y clavado en el alma. Tiene Nalo la sensibilidad y delicadeza dulzura del lino terso de mayo de nuestros campos andinos.
Tiene Nalo Alvarado Balarezo toda la prodigalidad de los campos sembrados de trigo, de maíz y alverjas, el alma aromada por los campos sembrados de anís, de manzanilla y de yerbabuena de sus campiñas de ensueño. Y de las amapolas a la vera de los torrentes
Tiene Nalo la paz de los huertos donde la hierbaluisa, el cedrón y el limoncillo de su casa de infancia se juntan para darnos al amigo que todos nosotros tenemos como un don preciado.
6. A los cuatro
vientos
Se cobija en él el trino límpido de los zorzales que entonan su canto salvaje después de la chirapa que tienta al toronjil y a la hierbasanta a que emitan la humedad de sus fragancias.
Se cobija en él el aleteo de la paloma que vuela a lo hondo de la quebrada. Y la claridad y la sombra del cántaro y su agua contemplativa.
Porque las páginas que él difunde a través de los blogs que dirige trasmiten esas esencias, como valor, filiación y pertenencia.
Como plena y total adhesión a las casas que hemos dejado y que él nos anima a volver y encontrarlas en la luz del alba.
Porque es Nalo una persona ponderada y altruista; sana y candorosa. Y siempre límpida.
Tiene el alma de trigo tierno. Y siendo así, qué importante es que tenga todo el reconocimiento del mundo. Y nuestra voz se empine para pronunciar su nombre a los cuatro vientos.
7. La marcha
de la historia
Y qué importante que un hombre con estas cualidades esté al frente de páginas que se esparcen hacia uno y otro confín. Y que conlleven las bondades de que él está imbuido.
Qué importante garantizar que aquello que se riega y esparce tengan los valores que venimos sosteniendo para nosotros y los demás.
Por eso el movimiento cultural Capulí, Vallejo y su Tierra le ha otorgado el diploma y medalla de: “Insigne portaestandarte de la utopía andina”.
Distinción que por primera vez otorga nuestra organización. Y qué bien que sea Armando Alvarado Balarezo quien lo reciba, siendo el primero.
Deseándole que viva muchos años para bien del Perú y del mundo andino. Y que la salud lo acompañe siempre,
Porque hombres como él que luchan incansables, sin reticencias ni mezquindades, son imprescindibles para la marcha alturada y señera de la historia de los pueblos.
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